miércoles, 21 de mayo de 2008

Campañas confusas

Ya en su momento, no caí en aquel anuncio de no-ci-lla que salían los tres niños contestando a tres preguntas con los monosílabos que formaban la marca, lo digo para que quede claro que no soy precisamente una de esas personas que lo pillan todo a la primera, me cuesta, lo admito. Las marcas juegan con nosotros pero a veces les sale un torpe como yo, y la cosa lejos de salir "ingeniosa", pues sale más bien "liosa". La última que me ha ocurrido de este tipo, es con los nuevos televisores Scarlet de LG. No hace ni una semana que me enteré del producto que se anunciaba, ya que en estos tiempos en los que las series se cuentan por miles, al ver el anuncio en ningún momento caí que se trataba de una televisión, sino que pensaba que se trataba de una nueva serie de algún canal de televisión en abierto o de pago. Esto me llevó a pensar dos cosas, la primera que la agencia que haya hecho esto, había conseguido con creces crear el paralelismo del lanzamiento de la nueva gama de LCD´s/Plasma y el estreno de una nueva peli, serie, o mini serie, y por esto entiendo que debían estar contentos. De lo que yo no debería estar en absoluto orgulloso, es de ver que cuando veo la televisión, mi cabeza está en una especie de stand by en el que lo mismo da ocho que ochenta, veo las imágenes, oigo los sonidos, pero realmente no me estoy enterando de nada, es información que excepto en el caso de Richards Claydermans sin control o similares, pasa sin pena ni gloria por mis neuronas que seguramente, inmersas en una monotonía desesperante, en lo que a TV respecta, dan por bueno que se trate de un anuncio de una serie, o cualquier cosa por poco que se parezca al producto que realmente se publicita. De todas maneras, mantengo la esperanza porque todavía soy bastante sensible a algunos aciertos o agresiones que se dan en el mundo de la publicidad, como el antes comentado Richard Clayderman, hablando de lo positivo, o Rizo, mascota de Genésis, hablando de lo negativo. Hoy debemos todos levantar nuestras copas, porque en el último spot que he visto de la conocida aseguradora ya no aparece aquel Rizo que tanto, tanto, nos irritó, o al menos a un servidor. Rizo, donde quiera que estés, no vuelvas.

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